Visualización creativa: Prosperidad no es sólo algo tangible. Somo prósperos en la medida en que nuestros pensamientos sean abundantes, y qué mejor manera de empezar el día que concentrando la energía en prosperidad. Dedique los primeros 5 o 10 minutos de su día (apenas se despierte y aún en la cama) a pensar abundantemente – en vez de concentrarse en los problemas a resolver. Construya este hábito y notará la diferencia. Qué es pensar abundantemente? Determine que su día será maravilloso! Véase a usted mismo durante el día sonriendo y feliz! Tenga pensamientos positivos y remítase a tiempos en que se sintió en paz y contento, y reproduzca esos sentimientos. Practique ejercicios de visualización para planear su día energéticamente. De esta manera, su día empezará de la manera indicada y esta energía positiva alimentará su actitud y pensamientos.
Gratitud: Tener la habilidad y hábito de agradecer abre el flujo de la prosperidad en nuestras vidas. Primero nos ayuda a concentrar la energía en aquello que ya tenemos, y estos pensamientos actúan como un imán que atrae aún más bendiciones. Segundo, la gratitud nos hace sentir prósperos y nos da perspectiva antes las cosas que quizá sentimos no son tan positivas. Agradezca incluso los obstáculos porque le permiten aprender y fortalecerse, y en una perspectiva espiritual, esto es lo que le hace avanzar más efectivamente! Cada día, repase la lista de cosas por las cuales se siente agradecido.
Afirmaciones: Los pensamientos y las palabras son energía en acción. Ponga en palabra aquello que quiere manifestar, y sin ninguna duda, verá el milagro en su vida. Sea consciente sin embargo que no se trata de colmarse de ambición y pedir esta vida y la otra! Afirme aquello que quiera en su vida y siempre aclárele al universo que usted está dispuesto a recibir eso que pide “o algo mejor y más conveniente!” Confíe en la sabiduría del universo. Muchas veces creemos que esto o aquello nos hará feliz y nos encaprichamos. Deje ir sus ambiciones humanas e invite la prosperidad de la mejor manera que pueda manifestarse en su vida. Si no está acostumbrado a trabajar con afirmaciones, dedique al menos 21 días seguidos a repetir sus afirmaciones elegidas. Repita la afirmación 21 veces en la mañana y 21 veces en la noche. Si lo puede hacer en voz alta aún mejor!
No se preocupe: La preocupación interrumpe el flujo de energía creativa y la reemplaza con obstáculos psíquicos que trabajan en su contra. Determine lo que quiere, afírmelo y luego déjeselo al universo. No se concentre día y noche en aquello que quiere manifestar. Tenga fe que la determinación ya ha sido expresada y los mecanismos de energía están ya en camino para la manifestación. Cómo y cuándo no le corresponde a usted. Deje ir la duda y concéntrese en algo más mientras se manifiesta la prosperidad en su vida. Y cuando lo haga, no olvide agradecer y apreciar!
Generosidad: La mejor manera de recibir, es dar. Y ni siquiera en términos filosóficos ni simbólicos. Cuando damos generosamente, enviamos el mensaje a nuestro inconsciente y al universo de que tenemos en abundancia – tanto, que podemos compartir! Cuando distribuimos estas bendiciones, el universo se encarga de proveernos suficiente para seguir dando! Y en términos de karma, recordemos que todo lo que va, viene! Hay muchas maneras de ser generoso con usted y otros, aplíquelas!
Termina el día próspero: Al igual que nos levantamos concentrándonos en la prosperidad que rige nuestras vidas, dediquemos los últimos 5 o 10 minutos de día antes de dormirnos apreciar todo lo bueno que vivimos en las últimas horas. Se sorprenderá de lo mucho que encuentra! Desde la persona que nos sonrió, hasta el haber podido comer lo que quisimos hoy, o el tener sentidos para apreciar el día soleado! Siempre hay algo positivo en cada día!